Hay que seguir Argentina
Este poema fue escrito a raíz de la muerte de dos manifestantes (piqueteros) en el Puente Pueyrredón, Buenos Aires. Fue leído en Madrid, en el Centro Internacional de Prensa, la casa de los periodistas acreditados (enviados especiales) al día siguiente de los sucesos citados.
Hay que seguir Argentina hay que seguir
aunque sea a la rastra,hay que seguir
hay que escrutar las rendijas del redil
Hasta salir, Argentina, hay que seguir...
Hay que seguir sin complejos ni amarguras
sin tapujos ,visillos ni cortinas
hay que encontrarle un lugar a la cordura
hasta mellar la punta de la espina
esa espina que hiere y que perfora
hasta la base misma del espanto
transformando la lágrima en espora
que el luengo viento distribuye en llanto.
Hay que cerrarle el paso a tanto oprobio
que esparce desde siempre y desde lejos
la maldita simiente de los odios
de las dudas perfidias y complejos.
Hay que seguir Argentina hay que seguir
evitar la violencia desatada
lo prioritario debe ser el pervivir
antes que todo se convierta en nada.
Habrá que hecerle caso a los avisos
al Puente Pueyrredón, las cacerolas.
porque la infamia se mueve sin permiso
mientras que siempre la razón, razona.
Hay que tapar la boca a los bocones
mentirosos de siempre y para siempre
que oculten su vergüenza en sus rincones
si es que tienen vergüenza los que mienten.
Hay que frenar al viento huracanado
con fronteras de luz y de prudencia
esposarlo a la historia y amarrado
echarlo a las mazmorras de la ausencia.
Hay que volver a ejercer de basurero
hay que limpiar lo sucio que heredamos
y tener bien aseados los senderos
para ir hacia el el futuro que deseamos.
Hay que volver a sembrar la vieja huerta
aferrrarse a la lluvia y al arado
hay que volver a abrir todas las puertas
que la infamia feroz haya cerrado.
No te puedes morir, te lo prohibo
te prohibo ceder al desaliento
te lo exige mi pluma y lo suscribo
con la angustia en voz alta de mis versos.
Hay que seguir Argentina hay que seguir
aunque sea a la rastra, hay que seguir
hay que escrutar las rendijas del redil
hasta salir Argentina, hay que seguir...
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